Este caso ilustra la gran mejoría facial que se produce en los tratamientos con cirugía y ortodoncia.

Vemos cómo al principio el paciente tiene un claro exceso de mentón y el labio superior queda muy hundido con respecto tanto a la nariz como al labio inferior.

En la fase media se han alineado los dientes pero se percibe aún mejor cómo los dientes inferiores quedan muy por delante de los superiores.

Al final, cuando se completa la cirugía y la ortodoncia el paciente tiene unos dientes completamente alineados y una relación de labios mucho más armónica que al principio. La mandíbula no tiene ese exceso de volumen que veíamos al principio y la nariz no se ven tan prominente(aunque NO se ha operado de nariz!!).

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